— Braza —

En este estilo el nadador flota boca abajo y ejecuta la siguiente secuencia de movimientos horizontales: con los brazos apuntando al frente y las palmas vueltas, se abren los brazos hacia atrás hasta quedar en línea con los hombros, siempre debajo de la superficie del agua, y luego se recogen por debajo del pecho para después moverlos hacia adelante. Las brazadas deben ser laterales, no verticales. Este es un punto muy importante y debatido en la natación de competición. Mientras se completa la última fase del movimiento de brazos se recogen las piernas para aproximarlas al cuerpo y luego, con las rodillas y los dedos de los pies hacia afuera, se estiran con un impulso, aprovechando que los brazos han vuelto al punto de partida y le aportan hidrodinámica al cuerpo. Luego comienza de nuevo todo el ciclo. El nadador inhala cuando el impulso de los brazos le permite asomar la cabeza por fuera del agua, y exhala debajo del agua.